lunes, 31 de agosto de 2015

Reglas básicas de vestimenta para mujeres en el mundo profesional

Como venimos comentando en los posteos anteriores, lo que decimos a través de la comunicación no verbal habla mucho de nosotros mismos. Por esto, en este nuevo posteo vamos a comentar algunas reglas básicas para vestirnos en diferentes ocasiones/situaciones. Esta vez, hablaremos de reglas básicas de vestimenta para mujeres. 


  • Ejecutiva




Desde los años ochenta, cuando la mujer comenzó a ocupar puestos importantes en las empresas, se impuso el traje sastre como el atuendo para demostrar poder y continúa siendo una opción factible en la oficina. Con el paso del tiempo, las mujeres han demostrado su capacidad y no temen verse femeninas en su área laboral. Por eso, ya asisten a reuniones luciendo hermosos vestidos y altísimos zapatos sin miedo de parecer superficiales que usan su físico para escalar en la jerarquía de la empresa. Los fines de semana, vuelven a la comodidad de sus jeans coordinados con camisetas o sweaters y zapatos de piso.



  • Trabajadora de Rango Medio
El traje sastre puede facilitarte la mañana al no tener que combinar más que la blusa. Los vestidos o los coordinados con top con falta o pantalón también pueden funcionar para tus labores. Si la empresa es un poco más relajada (como ya hablamos, siempre es importante ver el contexto y adecuarnos al mismo), probablemente puedas vestir jeans con blusas, camisetas y swetears abajo de un saco. Los zapatos van desde botas, botines, zapatillas y sandalias con o sin taco. 


  • Creativa
Este es el segmento con menos reglas, más opciones y por lo tanto el más variado. Las profesiones que pertenecen a este segmento van desde diseñadoras de moda y de imagen, a publicistas. actores, músicos, artistas, periodistas, entre otras. Suelen usar jeans combinados con algo diferente, zapatos de última moda o un saco de muy buen corte o accesorios de tendencia. Generalmente, están en los detalles, los accesorios, creando looks distintos e innovadores. Buscan muchas veces destacar y sobresalir saliendo de los básicos y los clásicos. Es un estilo interesante permitido a las mujeres que pertenecen a ambientes relajados donde la seriedad y la formalidad no es un factor predominante. 

  • Auto-empleadas
Las empresarias pequeñas que tienen algún microemprendimiento o trabajan recorriendo las calles, necesitan comodidad e imagen. Por eso optan por prendas suaves y cómodas, y las combinan con algún detalle más atractivo de color o estampa llamativa.





Como hemos visto, las tendencias y los estilos varian ampliamente. Lo principal es conocer el ambiente donde nos encontramos, y saber adaptarnos para dar una buena imagen. 

lunes, 24 de agosto de 2015

Lo que decimos vs. lo que aparentamos

Previamente, en nuestro posteo anterior, hablamos de la trascendencia que tiene nuestra imagen personal, la impresión que dejamos en los demás y la importancia de esta en el mundo de los negocios. 
Anteriormente, nos referimos más específicamente al modo en que nos adecuamos a un ámbito laboral desde nuestro modo de vestirnos. Hoy, quiero hablar de la comunicación no verbal, desde un modo más general, para luego focalizarnos más aún en cada aspecto particular.

Albert Mehrabian, investigador pionero del lenguaje del cuerpo, descubrió que cuando transmitimos un mensaje y nos comunicamos con otros, del impacto total del mensaje, un siete por ciento es verbal, un treinta y ocho por ciento es vocal, y un cincuenta y cinco por ciento es no verbal. 

Se trata del aspecto que tenemos cuando hablamos,
no de lo que en realidad decimos




Cuando investigué estos números, quedé sorprendida al darme cuenta que en total el 93% de lo que transmitimos al comunicarnos con otros tiene que ver con lo no verbal. Supongo que a ustedes les habrá sucedido algo similar, sin embargo analicen la situación, pónganla en sus mentes, y piensen cuánto de cierto tiene esto. Por ejemplo, cuando hablamos con alguien que no nos esta mirando, y sigue haciendo sus cosas como si no estuviéramos allí, parece que no nos está escuchando, por más que quizás si lo haga. Lo no verbal, lo que comunicamos ya sea con el cuerpo, las posturas, los gestos, las posiciones de nuestras manos, y nuestra apariencia en general cobra un papel fundamental a la hora de analizar al otro y entender su comportamiento y forma de actuar, es por esto que no podemos dejar pasarla por alto.

Ejemplos de gestos que se utilizan como comunicación no verbal.
 Todos conocemos claramente su significado, y no hace falta de las palabras para entenderlos.

La mayoria de los investigadores están de acuerdo en que las palabras se utilizan principalmente para transmitir información, mientras que el lenguaje del cuerpo se utiliza para negociar actitudes interpersonales y, en algunos casos, como sustitutos de mensajes verbales. 
Nos parece difícil aceptar que tenemos algunos comportamientos que se relacionan a determinadas conductas animales. Pero, al igual que cualquier otra especie, seguimos dominados por reglas biológicas que controlan nuestras acciones, reacciones, lenguaje corporal y gestos. Lo fascinante es que muchas veces no somos conscientes de nuestras posturas, movimientos o gestos y lo que decimos puede no tener nada que ver con lo que transmitimos con estos. 

 El lenguaje del cuero es un reflejo externo dela condicion emocional de la persona. 
Cada gesto o movimiento puede ser una clave valiosa 
para descubrir una emoción concreta que esa persona
 siente en ese preciso momento. 

Y, ¿en qué nos influye todo lo anterior en el mundo de los negocios? La verdad, es que en mucho. Si logramos ser capaces de no quedarnos solamente con el contenido de lo que se dice. Y podemos ver cómo se lo dice, con qué gestos, actitudes, movimientos, posturas, etc. vamos a ser capaces de leer mucho más allá de lo que dicen las palabras. Según los expertos, mediante el lenguaje no verbal podemos identificar cuando una persona nos miente, cuando esta nerviosa o cuando esta tranquila y confiada de lo que esta diciendo, lo cuál no es algo menor en el mundo de las negociaciones y las empresas. 




lunes, 17 de agosto de 2015

La imagen personal en el mundo de los negocios

¿Qué significa nuestra imagen en el mundo de los negocios?


Como es cotidiano escuchar, la imagen personal es un factor importante a la hora de entrar en el mundo de los negocios. Cuando uno se enfoca en conseguir un puesto de trabajo, debe visualizar cuál es la imagen que se solicita de acuerdo con los códigos de vestimenta en ese ambiente laboral. 

Nuestra imagen personal es una comunicación no verbal de nosotros mismos. Esto significa, que no podemos dejarla pasar por alto, debemos lograr que los demás tengan una buena primera impresión de nosotros. Es frecuente escuchar que criticar a las personas por su apariencia no es lo correcto, que hay que darles la posibilidad de hacerse conocer, pero, aunque suene contradictorio, la primera impresión que tenemos sobre una persona entra por nuestros ojos, y el trato y respeto que le demos en ese momento va a estar ligado con esa primera impresión.

La informalidad, los jeans, los trajes sin corbata predominan actualmente nuestro modo de vestirnos. Es notable que la tendencia formal de vestimenta solo perdura presente en pocos ambientes laborales. Sin embargo, eso no justifica que podamos ir a la oficina, a trabajar, o a una reunión en ojotas. Hay ciertos códigos que se deben respetar y tener en cuenta a la hora de vestirnos. Y cuando decimos esto, no quiere decir que hay que vestirse de etiqueta para una reunión, sino, simplemente conocer cuál es el evento, su formalidad y vestirnos de acuerdo a esto. 


Cuando uno tiene una buena imagen, responde al código de vestimenta apropiado, está prolijo y conforme consigo mismo demuestra seguridad y auto confianza. Dos cosas fundamentales en el mundo de los negocios. Ya sea en una reunión, en una entrevista o en día diario y cotidiano de una empresa, aquellos que van bien vestidos, seguros con su propia imagen demuestran que sus clientes, sus jefes y sus colegas pueden confiar en ellos. Dos ejemplos muy claros: si vamos a una oficina de abogados, uno vestido de jean y el otro de traje, claramente vamos a querer que nos represente el que tiene puesto un traje. Quizás el otro, sea un excelente abogado, pero la imagen demuestra poder, autoridad, respeto, confianza y seguridad. Otro ejemplo, una ejecutiva vestida como si fuese a una discoteca por la noche, con escote, la falta excesivamente corta, excesivo maquillaje y accesorios. Esta mujer, quizás  sea una excelente profesional, pero dará a pensar que su puesto no se lo ganó por sus capacidades, sino por esa forma provocativa y llamativa de vestirse. En ambos ejemplos, juzgamos y elegimos por la primera impresión que esa persona nos da. La primera impresión nos entra por los ojos, con lo que vemos, con lo que la persona nos dice con su forma de vestirse. Esto nos sucede cotidianamente, y estoy segura que todos van a coincidir con mis ejemplos. Suena prejuicioso, pero en este mundo la imagen es fundamental.


Para concluir, debemos decir, que cuando hablamos de vestirnos bien, no nos referimos a ponernos cosas lujosas, tapados de pieles llamativos, ni tacos de 15cm. En este mundo, menos es mas. Simplemente, hay que saber a dónde vamos, qué vamos a hacer y qué imagen queremos dar. Una vez que definamos esto, lo primordial es sentirnos cómodos y conformes con nosotros mismos, con seguridad y auto confianza, y esto es lo primero que vamos a reflejar en los demás ganando poder , autoridad y respeto en este mundo de los negocios.